La Cuaresma es de por si un tiempo de espera…de espera activa, reflexiva orante. La cuaresma siempre ha de ser vivida de cara a la Pascua, a la muerte y resurrección de Jesús, a esa pascua que transformó y transforma la vida de todos los cristianos.
La cuaresma es un tiempo de conversión, de reconciliación, un tiempo de amar a nuestro prójimo. Un tiempo en el que Dios nos invita a convertirnos y creer en el Evangelio.
Por eso la Iglesia en cada cuaresma nos propone 3 cosas : ayuno, oración y limosna.
El ayuno genera en nosotros una especie de vacío, de hueco a ser rellenado..de necesidad a ser atendida.
La oración siempre es sinónimo de búsqueda y de encuentro, de diálogo fecundo con Dios. La oración le da a Dios el lugar más importante en nuestra vida.
Y la limosna consiste no en dar aquello que nos sobra sino en compartir lo que tenemos y lo que somos; y somos tiempo, somos amor, somos rostro de Dios revelado.
Por eso en esta cuaresma tan especial donde la esperanza de la resurrección cobra aún mas fuerza te invitamos a vivir estos tres propósitos dejándonos atravesar por la realidad de emergencia en la que estamos.
Vivamos el ayuno privándonos de salir corriendo a juntarnos con nuestros seres queridos y abrazarlos como una oportunidad para hacerlo más tarde con más ganas aún y como una renuncia personal por el Bien Común.
Vivamos la Oración como ese espacio privilegiado de encuentro con Dios para poner este mundo en Sus manos pidiendo por todos los afectados por la enfermedad, la soledad, el desconsuelo y la desesperanza.
Vivamos la limosna entregándonos a los mas vulnerables, dando aquello que verdaderamente podemos ofrecer hoy: la escucha activa, la compañía aunque sea virtual, el servicio en casa a nuestra familia.
Señor, tú que quisiste nacer y crecer bajo el humilde techo de Nazaret haz que en estas semanas de espera podamos recibirte en nuestro corazón ,que la alegría de saberte con nosotros pueda mas que el temor y el desconsuelo. Que tomemos conciencia de la maravilla de la Creación , que cambiemos nuestras acciones egoístas para cuidar nuestra casa común y que podamos salir fortalecidos, renovados, más humanos, más agradecidos de la vida, mas parecidos a ti.